sábado, 27 de febrero de 2010

Ringo Bonavena, Corazón de Gigante

Ringo Bonavena

Oscar Natalio Bonavena, conocido como Ringo (Buenos Aires, 1942 - EE.UU., 1976) fue campeón amateur de los pesos pesados entre 1959 y 1964, etapa en la que sumó dos coronas latinoamericanas (1961 y 1962) y una sudamericana (1962). De sus 68 peleas la mayoría se desarrolló en Estados Unidos, fueron 58 peleas ganadas, 9 perdidas y 1 empatada. Fue el boxeador más carismático y extrovertido de Argentina; su forma de pelear y su excepcional personalidad lo convirtieron en una de las figuras más populares de la década del '70. Ringo inició su carrera como boxeador en el Club Huracán. En 1963, Ringo enfrentó a Lee Carr en San Pablo, pero fue descalificado debido a que le mordió una tetilla. Sancionado por la Federación Argentina de Boxeo decide emigrar a Estados Unidos y el 3 de enero de 1964 debutó como preliminarista en el Madison Square Garden logrando vencer por knock out en el primer round a Ron Hicks.
Después de varios rivales de segunda línea y derrotado por Zora Folley, decide volver a la Argentina aprovechando que la sanción de la Federación Argentina de Box había terminado. El regreso de Ringo al pugilato argentino estuvo repleto de incidentes provocados por él mismo con afán de promoción.
El 4 de septiembre de 1965 pelea contra Goyo Peralta en el Luna Park por el título argentino de peso pesado. Ringo subió a la lona y recibió la silbatina más fuerte que se recuerde en la historia del box nacional; Goyo fue vivado y ovacionado por todo el estadio. Bonavena definió la pelea por KO.

Ringo & Mohammad Alí

Le llueven de nuevo los contratos y vuelve a los rings norteamericanos. El 7 de diciembre de 1970 se enfrentó a Cassius Clay en el Madison Square Garden, perdiendo en el último round y decretándose knock out automático. 
Vuelve a Argentina pero al poco tiempo decide volver a EE.UU. porque acá ya no tenía contrincantes. En Estados Unidos consigue varios contratos para pelear, aunque vivía en una casa rodante; pero en Argentina tenía varios negocios atendidos por sus hermanos y además compraba algún que otro jugador de fútbol para Huracán.
El 22 de mayo de 1976, Ringo fue al "Mustang Ranch", prostíbulo de Joe Conforte (su ex manager), donde, en un confuso episodio, Williard Ross Brymer, el custodio de Conforte, le disparó causándole la muerte. Se dice que el asesinato de Ringo Bonavena fue planeado por Joe Conforte al enterarse del romance del boxeador con su esposa Sally. Pero existe otra versión sobre su asesinato. Según un testigo, Ringo habría firmado un contrato para enfrentarse en una primera serie, para que después de pasar una eliminatoria combatiera el ganador con el por entonces campeón mundial, Mohammad Alí.
Las apuestas de los bookmakers se hallaban en un diez a uno a favor de Bonavena cuando éste recibe una llamada de la mafia indicándole que debía retirarse en el quinto round. Ringo se niega y la mafia lo amenaza de muerte. Entonces, Bonavena decide regresar a su país pero le desaparecen el pasaporte y los documentos de identidad. Angustiado, llama a su esposa y le dice "espero estar el lunes por allá, pero si algo me ocurre rezá por mí..."
El último adiós fue tributado en el Luna Park ante doscientas mil personas, hallándose en primer lugar el ex presidente Alejandro Agustín Lanusse y las nuevas glorias del momento: Carlos Monzón y Víctor Galíndez. El querido Ringo recibió sepultura en el Cementerio de la Chacarita, en Buenos Aires.

Poema a Ringo

Cómo voy a recordarte que no sea de esta manera
Con tu risa de atorrante, de atorrante pero buena
Con tu espalda de gigante, ancha como un mar sin tregua
y tu mano franca, franca para el pobre siempre abierta

Como voy a recordarte que no sea de esta manera
Como puedo imaginarte sin habano y sin galera
sin domingos de ravioles amasados por la vieja
y después del beso tierno a ver al Globo en la Quema!!

Cómo voy a recordarte que no sea de esta manera
Si un frío mayo, ahí tan frío como tu ausencia
diste duro tu gran pelea, la de la vida, la que no espera

Cómo voy a recordarte que no sea de esta manera
Qué sin vos Ringo, las calles están grises como niebla
Si un payaso tembloroso se acurruca en cada puerta
y la hinchada ya no canta ni la Quema está de fiesta.
La tristeza creció tanto que me abraza como hiedra.

¡Cómo voy a recordarte Ringo, que no sea de esta manera!

Simpático, Carismático y Entrador, por Siempre Ringo

miércoles, 24 de febrero de 2010

Camila O'Gorman y Ladislao Gutiérrez, Historia de un Amor Trágico

Bella y desdichada Camila O'Gorman

Camila O'Gorman (1828-1848), fue una joven de familia de clase alta patricia que protagonizó una romántica y trágica historia de amor durante el segundo gobierno de Juan Manuel de Rosas. Considerada un baluarte de la sociedad, Camila fue educada y criada para casarse con un miembro de familia ilustre para que asegurara la descendencia, la continuidad de la herencia, ser una esposa fiel y madre ejemplar. Sus hermanos, como era típico en la Argentina postcolonial, se embarcaron en respetables carreras en la sociedad argentina. Uno de ellos, Eduardo O'Gorman, buscó una posición en la Orden Jesuita, mientras que otro hermano fue Oficial de Policía y eventualmente el fundador de la Academia de Policía de Buenos Aires. Camila era íntima amiga y confidente de la hija de Rosas, y concurría con frecuencia a bailes en fiestas formales en el Palacio Presidencial. La jovencita era dueña de una fuerte personalidad, quizás heredada de su célebre y bella abuela, Anita Perichon, amante del Virrey Liniers.
Como era frecuente en las jóvenes de esa época, Camila acostumbraba asistir a misa y precisamente la actual Iglesia del Socorro, ubicada entre las calles Suipacha y Juncal, fue escenario del despertar de este amor desgraciado. Camila tenía 18 años y allí mismo conoció al joven sacerdote jesuita Ladislao Gutiérrez, de 24 años, quien había sido compañero de seminario de Eduardo O'Gorman, el hermano de Camila, y que había llegado a Buenos Aires procedente de Tucumán. Pronto comenzó a ser invitado a la propiedad familiar de los O'Gorman.
Corría el año 1847, plena época rosista, los jóvenes se hicieron amigos y empezaron a encontrarse en sus paseos por Palermo, así comenzaron rápidamente un apasionado romance clandestino. Enamoradísimos, empezaron a pensar en huir de Buenos Aires y cambiar de identidad para que no los descubran las autoridades eclesiásticas y civiles. Secretamente reunieron dos caballos y algo de dinero. A la madrugada del 11 de Diciembre de 1847 juntos parten huyendo hacia Luján, de allí pasaron a Santa Fe, Entre Ríos y Corrientes y, si todo salía bien, pensaban llegar hasta a Río de Janeiro. Mientras tanto, todo Buenos Aires se consternaba.

Ladislao y Camila, amor más allá de la muerte

El 23 de Diciembre de 1847, su padre, Adolfo O'Gorman, denunció el hecho al gobernador diciendo que su hija, seducida por el párroco, había sido raptada. Rosas mandó detener a la pareja en cualquier lugar que se encontraran ya que debían ser reprendidos por tan escandaloso proceder. Él, sacerdote; ella una niña de sociedad. Juntos se atrevieron a desafiar el deber ser y las convenciones de la época, ¿podría el Restaurador de las Leyes y el Orden perdonar este desacato hacia su persona?
La provincia de Corrientes, que estaba bajo el control de opositores del Gobernador, declararon que la tiranía de Rosas era culpable de corromper la moral de la mujer argentina. Mientras tanto, la suerte parecía estar del lado de los enamorados. En Paraná habían conseguido pasaportes falsos y al llegar a Goya, empezaron a prepararse para llegar a Brasil y, para ganarse la vida, abrieron una escuela, la primera que existió en esa pequeña ciudad. Allí vivieron algunos meses de relativa felicidad tratando de olvidar la persecución de que eran objeto pero una fatídica tarde, en una reunión, el sacerdote irlandés Michael Gannon reconoce a Ladislao Gutiérrez. La noticia corrió como reguero de pólvora y al día siguiente fueron encarcelados e incomunicados. Camila negó haber sido raptada y afirmó ser la iniciadora del romance y la ideóloga de la fuga. Nada importó, O'Gorman y Gutiérrez fueron traídos nuevamente a Buenos Aires para ser juzgados.
Camila insiste con que no se arrepiente de nada, que se siente satisfecha y que su conciencia está tranquila. Estas declaraciones no hicieron más que corroborar su posición subversiva. Ante el clamor popular contra la violación de los votos de castidad del sacerdote y la mala reputación que se temía atrajera sobre la comunidad irlandesa, fueron condenados a muerte. Camila, supuestamente, estaba encinta; por lo tanto, para "liberar del pecado" al hijo que llevaba en su vientre, le dieron de beber agua bendita. Un poco más tarde y sin piedad, fueron fusilados en la mañana del 18 de agosto de 1848 en el Cuartel General de Santos Lugares (actualmente San Andrés, partido de San Martín) y tal fue el escándalo internacional que se desató por las víctimas inocentes, que contribuyó a la caída política de Juan Manuel de Rosas.

martes, 23 de febrero de 2010

Raffaella, la Più Bella

Fabulosa y Divina Raffaella Carrá

Es la dueña del lado divertido de la vida. Ella es festiva, alegre y desinhibida.
Cuando yo era chica hacía furor Raffaella Carrá, gran cantante, gimnasta y bailarina italiana; todas las nenas imitábamos sus pasos. Me encantaba su show de color y alegría; yo estaba como poseída, de milagro no me desnuqué imitando su baile.
Y lo mejor de todo es que esta artista extraordinaria, tiene la misma energía y vitalidad hoy que hace treinta años atrás. Cuando ella aparece seguro explota la fiesta, nadie puede dejar de sucumbir al encanto de la espectacular diva italiana. Brava Raffaella!

sábado, 20 de febrero de 2010

Cerebros: la Eterna Diferencia

Hombres y Mujeres tenemos sistemas cerebrales completamente distintos. El cerebro masculino está más dividido entre sus dos hemisferios, se podría decir que su pensamiento es paso a paso. Está ligado al poder, la potencia, al reconocimiento social y de relación.
Por el contrario, el cerebro femenino está más conectado entre sus dos hemisferios y su pensamiento es integrado, funciona en red. Está ligado a la afectividad, a la sensibilidad, a la belleza y posee mayor flexibilidad.
El pastor Mark Gungor nos muestra estas diferencias por vía de la risa.

jueves, 18 de febrero de 2010

Raúl Barón Biza, Todo estaba Sucio

Raúl Barón Biza, espíritu indómito

Escritor y político argentino de la Unión Cívica Radical, Raúl Barón Biza (1899-1964) fue el hijo de un terrateniente multimillonario de Córdoba y desde su juventud incursionó en política tomando una posición inusual en las clases acomodadas. Se abocó a la literatura y a los negocios, introdujo el cultivo del olivo y organizó la explotación de minas en el noroeste del país.
De vacaciones en Italia, conoció en Venecia a la actriz austríaca Myriam Stefford, con quien contrajo matrimonio en 1930. La pareja se afincó en Argentina y alternaba su residencia porteña con la estancia "Los Cerrillos" de Alta Gracia, Córdoba. Entre las peculiaridades del alocado tren de vida estaba la afición de Stefford a la aviación y adquirieron un monomotor con la intención de recorrer con él el país. Myriam Stefford fue una de las primeras mujeres piloto de Argentina. Poco antes del primer aniversario de la boda, Myriam participaba de un raid aéreo cuando se precipitó a tierra, en la provincia de San Juan.

Raúl Barón Biza y Myriam Stefford

La prensa sensacionalista afirmaba que el accidente había sido provocado por el esposo; pero él le dedicó un colosal monumento en su memoria, erigido en el campo familiar. Se trata de un obelisco de 82 metros de altura en cuya base hay una cripta abovedada donde descansan los restos de Myriam Stefford y lleva la inscripción: "Viajero, rinde homenaje con tu silencio a la mujer que, en su audacia, quiso llegar hasta las águilas".
Otra leyenda sobre la misma base que cubre los restos de la aviadora dice: "La maldición caerá sobre quien ose profanar esta tumba". Se asegura que Barón Biza junto con los restos de su mujer hizo enterrar todas sus joyas, entre otras el famoso diamante Cruz del Sur.

Obelisco en Homenaje a Myriam Stefford

Mientras tanto, la situación política de Barón Biza peligraba; había apoyado a José Félix Uriburu, cuando éste derrocó a Hipólito Yrigoyen pese a su antigua simpatía por el político radical, pero poco después comenzó a combatir al régimen de la Década Infame. La publicación de un periódico opositor lo llevó a la persecución y al exilio en Uruguay, pero tampoco allí pudo actuar libremente. La convocatoria de una huelga de protesta contra los gobiernos argentino, uruguayo y brasileño lo llevó a prisión en el país transplatino. Esta gesta se ve reflejada en su libro Por qué me hice Revolucionario (1932) publicado en Uruguay. Una segunda edición saldría en Argentina un año después con varios párrafos censurados. Es en la cárcel cuando finaliza los trámites de publicación de la más célebre y controvertida de sus obras: El Derecho de Matar, una novela pornográfico - filosófica. El libro estaba revestido en plata y en su portada aparecían una calavera y una guadaña ensangrentada.
Barón Biza hizo enviar uno de los ejemplares al Vaticano mofándose del Papa con estas palabras: "para que tus porteros lo dejen pasar, para poder atraer tu atención, para que él sea una nota relevante de brillo en el salón entristecido de tu biblioteca oscura; he revestido de plata su portada".
El Derecho de Matar cuenta la historia de Jorge Morganti, su hermana Irma y su amante Cleo. El relato es intencionalmente desparejo. Es una narración sesgada por reflexiones filosófico - morales que oscilan entre el erotismo tradicional y la aguda sensibilidad de Barón Biza. Pese a no ser su mejor trabajo, El Derecho de Matar se convirtió en su libro más famoso y en la "obra maldita" por excelencia de las letras latinoamericanas. Sin embargo, el gobierno de Agustín Pedro Justo confiscó en la imprenta la tirada completa de cinco mil ejemplares e inició contra Barón Biza un proceso por obscenidad. Logró una absolución, aunque permanecería en la cárcel por razones políticas.

Dandy, disfrutando un momento

No había sido liberado aún cuando, enterado de la muerte de Yrigoyen, alquiló un tren al que vistió de luto para transportar desde Córdoba a los radicales que deseasen participar del cortejo fúnebre.
Posteriormente, publicó una segunda versión de El Derecho de Matar en edición rústica ya que deseaba que la obra fuera accesible para el bolsillo de los obreros.
Poco después de su liberación, comenzó una relación romántica con Rosa Clotilde Sabattini, 20 años menor que él, hija de su estrecho amigo el prestigioso médico y líder radical Amadeo Sabattini.
En 1935 contrajo matrimonio en secreto con ella, que tenía 17 años, lo que marcó la ruptura de la amistad con su padre. El matrimonio abandonó la Argentina para que la joven siguiera sus estudios en Suiza y otros países europeos; más tarde Clotilde sería una importante figura en el desarrollo de la pedagogía argentina.
En 1940, regresaron al país, pero la persecución política del gobierno peronista los llevó a exiliarse nuevamente en Montevideo. Allí nacerían sus hijos Carlos, Jorge y María Cristina. Regresaron a Argentina a finales de esa década. En 1950, las desavenencias en la pareja habían llegado a tal extremo que Alberto Sabattini, hermano de la esposa, se batió a duelo con Barón Biza, resultando ambos heridos de bala. En el interín, la principal ocupación de Barón Biza había sido la literatura, publicando en 1942 Punto Final, la más cruda de sus obras que le valió un nuevo proceso por obscenidad.
En Punto Final se combinan de manera magistral nihilismo, erotismo y refinada ironía. Es su trabajo más explícito desde lo sexual pero no está exento de un caudal poético elegante y que lo diferenciaba claramente de la literatura prohibida. Un crítico de la época, escandalizado por el crudo estilo de Raúl, refirió: "Es el fruto de un cerebro enfermo en donde se dan cita cuanto de más infame, cínico, canalla y blasfemo pueda escribir la más envilecida de las plumas. Sólo hay una definición para el autor y su producto literario: se trata de la obra de un degenerado, en el más amplio sentido de la palabra".

Aunque mayor, todavía son tiempos turbulentos...

En 1953 su matrimonio se rompió definitivamente, y Clotilde se trasladó a Montevideo.
Cuando Arturo Frondizi alcanzó la presidencia la llamó para encabezar el Consejo Nacional de Educación y ofreció a Barón Biza un puesto diplomático en Hungría.
A finales de 1963 publica el que probablemente sea el punto más alto de su genialidad literaria, el excepcional Todo Estaba Sucio. Se trata de un libro más pesimista que los anteriores, en el que se alternan párrafos de un brutal antisemitismo con oscuras reflexiones sobre el destino de la humanidad. Su hijo Jorge (también escritor) definió la obra como "un torrente de resentimiento absoluto".
En 1964, Clotilde Sabattini había fijado una visita con sus abogados para dar fin a los trámites de separación legal. En el curso de una discusión, a poco de recibirlos, Barón Biza ofrece whisky a los letrados y a su mujer, a quien repentinamente arrojó ácido clorhídrico en el rostro, lo que le provocó gravísimas quemaduras. La mujer lanzó un grito desgarrador y se llevó las manos desesperadamente a la cara. Raul Barón Biza huyó del lugar mientras los abogados trasladaban a la mujer al Instituto del Quemado, donde fue operada en la cara, el pecho y las manos.
Tras la denuncia, la policía allanó la residencia de Barón Biza; se aproximaban al tétrico espectáculo final, en el dormitorio hallaron el cadáver de Raúl, que se había disparado en la sien. Hoy su cuerpo reposa debajo de un gran olivo, a pocos metros del obelisco que erigiera en honor de su amada Myriam Stefford y legó a la Municipalidad de Lomas de Zamora una fastuosa propiedad que poseía en la zona, el hoy llamado Parque Barón.
La pobre desdichada Clotilde Sabattini fue sometida con el tiempo a múltiples intervenciones quirúrgicas pero no pudo reparar el daño producido por el ácido. Su vida se transformó en un tormento físico y psicológico y en 1978, luego de terminar un importante informe sobre la situación laboral de la mujer en la Argentina para la UNESCO, se suicidó arrojándose por la ventana de su departamento de Buenos Aires. Marcados por la tragedia, su hija María Cristina y su hijo Jorge también decidieron terminar con sus vidas en años posteriores.

Obras de Raúl Barón Biza

Del ensueño (1917)
Alma y carne de mujer (1923)
Risas, lágrimas y sedas (1924)
Por qué me hice revolucionario (1932)
El derecho de matar (1933 - 1935)
Punto final (1942)
La gran mentira (1959)
Todo estaba sucio (1963)

Su producción literaria fue muy extensa, pero lamentablemente hoy sus obras se buscarán en vano, jamás fueron reeditadas y su obra ha desaparecido material y culturalmente.

martes, 16 de febrero de 2010

Titanic, Destino: Trágico

Soberbio Titanic

El Titanic, presentado como el buque más grande, "insumergible" y más sólido jamás construido, comenzó su viaje inaugural el 10 de abril de 1912; partió desde Southampton, Inglaterra, con destino a Nueva York. El barco tuvo un viaje placentero y los días transcurrieron sin novedad pero el 13 de abril empezaron a llegar los primeros informes de avistamiento de bloques de hielo, los cuales fueron ignorados o no tomados en cuenta ya que su Capitán, Edward John Smith, deseaba hacer el menor tiempo en su viaje inaugural. El 14 de abril, el transatlántico navegaba a todo vapor en aguas muy tranquilas a pesar de los avisos constantes de la presencia de hielos; el mar se veía como un verdadero espejo de líquido negro, lo cual era un inconveniente para avistar icebergs.

Los botes salvavidas fueron insuficientes,
el Atlántico los devoró

Poco antes de la medianoche los vigías dieron alarma de iceberg al frente, y, para evitar la colisión giraron el timón (que era muy pequeño para la longitud del navío) y seguidamente dieron marcha atrás pero ya era tarde, el Titanic quedó sentenciado. El Atlántico devoró al navío que se hundió en 2 horas 40 minutos, en las primeras horas del día 15. Fue uno de los peores desastres marítimos en tiempos de paz. Murieron 1517 personas debido principalmente a que no llevaba suficientes botes salvavidas. Rescataron 706 sobrevivientes. El Titanic se diseñó utilizando las más avanzadas tecnologías disponibles en aquel momento. Para su tiempo, no tenía rival en lo que se refiere a lujo y elegancia, pero no pudo con la fuerza de la naturaleza.

La Orquesta del Titanic

Integrantes de la Orquesta

Muchos de los tripulantes fueron héroes, con tanto coraje como amor y lealtad a su trabajo. Durante su hundimiento, los ocho miembros de la banda se situaron en el salón de primera clase en un intento por hacer que los pasajeros no perdieran la calma ni la esperanza. Más tarde continuaron tocando en la cubierta y no dejaron de tocar incluso cuando ya era seguro que el buque se hundiría. Ninguno de los integrantes de la banda sobrevivió al naufragio, algunos testigos dijeron que la última canción que interpretaron fue "Nearer, my God to Thee" ("Más cerca, oh Dios, de Tí").

¿Estaba Escrito?

Catorce años antes que navegara el Titanic existió un libro de ficción llamado Futility, or The Wreck of The Titan (El Naufragio del Titán o Futilidad), era una novela escrita por Morgan Robertson en 1898 que describía un barco llamado Titán que se creía inhundible. Algunos lo consideran un libro premonitorio, para otros se trata sólo de una asombrosa coincidencia.

Levantar el Titanic

Espectacular hundimiento del Titanic

Desde que se hundiera en 1912, mucho se ha debatido sobre si los restos del barco naufragado deberían sacarse o no del lecho marino. Hay quienes opinan que recuperar los objetos sumergidos sería como profanar una tumba. Otros creen que el barco y su contenido deberían salvarse y exhibirse en un museo. A casi cien años de la tragedia, el debate sigue vivo. Entre tanto, el oxidado transatlántico "inhundable" corre peligro de desintegrarse.

domingo, 14 de febrero de 2010

Deben ser Angeles

Creo en ángeles, el Cielo los envía, y aquí en la Tierra se llaman "Amigos"

No tienen alas. Parecen personas comunes, pero no, estoy convencida: son ángeles.
Algunos son perfectos extraños, capaces de acciones extraordinarias porque sí, sin pedir nada a cambio. Sutiles y alegres, aparecen en momentos clave, difíciles y desaparecen. Sin embargo, hay excepciones porque hay otros ángeles que sí veo y trato y me confirman cada día que son ángeles verdaderos. Ellos dicen que no, que nada que ver, pero a mí no me engañan. Y de todas estas personas especiales, hay alguien (que además se llama Angel!) a quien, creo, nunca podré terminar de agradecer su bondad, sencillez y grandeza.

jueves, 11 de febrero de 2010

Libertador General Don José de San Martín

El Libertador de América, Generalísimo y Protector de la República del Perú y Fundador de su Libertad; Capitán General de la República de Chile y Brigadier General de la Confederación Argentina que por expreso pedido y ruego de Sucre envió refuerzos al Norte, con los que consiguió la Victoria de Pichincha que dio la independencia a Ecuador, nació en Yapeyú, provincia de Corrientes, en 1778.

General Don José de San Martín

Se trasladó a España junto con sus padres en el año 1784 donde ingresó al Seminario de Nobles de Madrid. En 1789 comienza su carrera militar en el regimiento de Murcia.
En 1808 las tropas de Napoleón invadieron la Península y el rey Fernando VII fue hecho prisionero. Poco después estalló la rebelión contra el emperador y contra su hermano José Bonaparte, que había sido proclamado Rey de España. Se estableció una Junta Central de Gobierno, que actuó primero en Sevilla y luego en Cádiz. San Martín fue ascendido por la Junta al cargo de Ayudante 1º del Regimiento de Voluntarios de Campo Mayor. Distinguido por sus acciones contra los franceses, fue ascendido a Capitán del Regimiento de Borbón. Su principal actuación fue en la gran victoria de la Batalla de Bailén, del 19 de julio de 1808, en que tuvo una actuación destacada como ayudante del general Coupigny.
Esta victoria fue la primera derrota importante de las tropas de Napoleón, y permitió al ejército de Andalucía recuperar Madrid. En premio por su actuación, San Martín recibió el grado de Teniente Coronel y una condecoración con una medalla de oro.
Continua luchando contra los franceses en el ejército de los aliados: España, Portugal e Inglaterra. Combate a las órdenes del general Beresford en la batalla de Albuera.
En 1811 renunció a su carrera militar en España. Conoce a Lord Macduff, noble escocés, que lo introduce a las logias secretas que complotaban por la independencia de América del Sur. Por su intermedio obtuvo un pasaporte para viajar a Inglaterra, donde se encontró con compatriotas de América española: Alvear, Zapiola, Andrés Bello, Tomás Guido, entre otros. Todos formaban parte de una logia que había fundado el "Precursor", Miranda, quien, junto con Bolívar, ya luchaba en América por la independencia de Venezuela. En enero de 1812, San Martín se embarca hacia Buenos Aires en la fragata inglesa George Canning.
A los pocos días de su arribo, le fue reconocido el grado de Teniente Coronel y el Triunvirato le encomendó la creación de un escuadrón, que luego fue el célebre Regimiento de Granaderos a Caballo. Durante ese año se ocupó de instruir a la tropa en las modernas técnicas de combate que conocía por su extensa actuación europea contra los ejércitos de Napoleón.
Además, se ocupó de organizar una sociedad secreta que se denominó la Logia de Lautaro —este era el nombre de un caudillo araucano que defendió la libertad de su pueblo a los comienzos de la conquista española—. La sociedad estaba formada como las logias masónicas de Cádiz y de Londres, similar a la que en Venezuela tenía como miembros a Miranda, Bolívar y Andrés Bello. Su objetivo era: "trabajar con sistema y plan en la independencia de la América y su felicidad".
Como todas, aquella época era compleja, problemática e inclemente. Las mezquindades, la envidia e intrigas políticas estaban a la orden del día. San Martín enfrentó dificultades permanentes y numerosas pero su extraordinaria fe y fortaleza hizo que fundara patrias contra viento y marea; cruzó Los Andes batallando y enfermo; surcó las pampas; navegó los mares más tumultuosos; triunfó en todas partes y renunció a todos los honores.

San Martín, durante el Histórico Cruce de los Andes

Por ingratitud con el Libertador, tras liberar a medio continente, apenas si pisó la Argentina. Murió en Boulogne sur Mer, Francia, en 1850. Finalmente, en 1880 sus restos llegan a Buenos Aires y descansan en el Mausoleo de la Catedral.

Máximas a su Hija

San Martín escribió una lista de consejos para su hija Merceditas:

1. Humanizar el carácter y hacerlo sensible aún con los insectos que nos perjudican.
2. Inspirarle amor a la verdad y odio a la mentira.
3. Inspirarle una gran confianza y amistad, pero unida al respeto.
4. Estimular en Mercedes la caridad con los pobres.
5. Respeto sobre la propiedad ajena.
6. Acostumbrarla a guardar un secreto.
7. Inspirarle sentimientos de indulgencia hacia todas las religiones.
8. Dulzura con los criados, pobres y viejos.
9. Que hable poco y lo preciso.
10. Acostumbrarla a estar formal en la mesa.
11. Amor al aseo y desprecio al lujo.
12. Inspirarle amor por la Patria y por la Libertad.

Sargento Cabral 

Juan Bautista Cabral, correntino como San Martín, pasó a la inmortalidad por un acto de arrojo cuando, en plena batalla, el caballo del Libertador fue derribado trabándole una pierna. El granadero Baigorria traspasa con una lanza a un soldado español que intentaba herir a San Martín. El soldado Juan Bautista Cabral echó pie a tierra y levantó el caballo permitiendo a su jefe incorporarse, interponiendo su cuerpo entre San Martín y las bayonetas que lo hirieron de muerte. Murió en el Convento de San Lorenzo, que estaba siendo utilizado como hospital de campaña. En su lecho de muerte se le oyó decir: "Muero contento, hemos batido al enemigo". Soldado raso, murió a la edad de 24 años y fue ascendido post mortem a Sargento por San Martín.


martes, 9 de febrero de 2010

Maitena II

Maitena es una genial humorista gráfica argentina que recrea como nadie escenas de la vida diaria. Chicas attenti!

lunes, 8 de febrero de 2010

Edith Piaf, el Gorrión de París

Edith Piaf, glorioso ícono de Francia

Francia tiene una cultura musical trovadoresca con una gran base en la poesía lírica dramática; me gusta la emoción que transmite París, su gente parece tener el corazón en un sueño y por eso es conocida como la ciudad del eterno romance; y Edith Piaf es la más monumental leyenda de esa cultura.
Esta cantante única nunca vivió un lecho de rosas; Edith nació en plena calle debajo de una farola frente al número 72 de la calle Belleville en París, y desde entonces su vida estuvo marcada por los sinsabores y la desdicha, lo que ejerció una influencia decisiva sobre su estilo interpretativo entre lírico y desgarrado al mismo tiempo. Su verdadero nombre era Edith Giovanna Gassion y la apodaron Piaf -que significa "gorrión"- por su aspecto desvalido y su poderosa voz.

Supervivencia, Lirismo y Melancolía

La eterna musa del amor se inició en la canción en 1938 con Le fanion de la légion, éxito que la llevó a los escenarios de la rive gauche parisina. Su consagración llegó tras la Segunda Guerra Mundial ganándose la admiración del público. A partir de 1950 promocionó a Yves Montand, Charles Aznavour y Gilbert Bécaud, seguidores de la escuela que ella había creado.
La vida de Edith Piaf fue una permanente lucha por cantar y sobrevivir, pero a pesar de tener una existencia tumultuosa plagada de constantes enfermedades, todo lo hizo con pasión y debido a su extraordinaria personalidad y fuerza interpretativa sigue siendo la cantante francesa más popular de la historia.
No puedo dejar de escucharla, Edith me conmueve hasta las lágrimas, toca las fibras más sensibles del alma. En este video interpreta L´Hymne a l´amour, una de las canciones más bellas de Francia.

sábado, 6 de febrero de 2010

El Gaucho Martín Fierro

El Gaucho Martín Fierro, genuino representante del país

Es el nombre del maravilloso poema gauchesco del escritor y periodista argentino José Hernández (1834-1886), que fue publicado en dos partes: El Gaucho Martín Fierro (1872) y La Vuelta de Martín Fierro (1879). Hernández rinde en su magna obra un insuperable homenaje al Gaucho, héroe nacional y emblema de la argentinidad.
El lenguaje del libro es un claro exponente del habla rural y fue traducido a más de 70 idiomas, incluidos el quichua y el esperanto. La obra relata el carácter independiente, heroico y sacrificado del gaucho, otorgándole su calidad de genuino representante del país. Fue escrita en 7210 versos octosílabos, y capta como ninguna otra el espíritu gauchesco narrando en primera persona las aventuras del protagonista y de diversos personajes secundarios; es considerado el Poema Nacional Argentino y es una obra maestra de la literatura universal.
Don José Hernández, realiza en su obra un riguroso alegato contra las injusticias a las que son sometidos los gauchos en manos de magistrados y militares, al tiempo que evoca un bucólico pasado por siempre desaparecido.

Resumen del Argumento

El gaucho Martín Fierro debe abandonar su rancho, su mujer y sus dos hijos varones porque es reclutado forzadamente para luchar en las fronteras argentinas formando parte de las milicias, y a partir de ese hecho traumático se desencadenarán sus peripecias y su "pena extraordinaria".
Después de vivir en el fortín durante tres años, soportando miserias y humillaciones, deserta y se va a vivir con los indios. Se hace amigo del Sargento Cruz, otro desertor que le ha salvado la vida. Al regresar a su casa, encuentra que ha sido destruida y su familia se ha marchado. La desesperación lo empuja a unirse a los indios y a convertirse en un hombre fuera de la ley. En "La Vuelta de Martín Fierro" se reune por fin con sus hijos y vuelve a la sociedad, para lo que ha de sacrificar gran parte de su libertad.

Versos del Martín Fierro:
Primeras Estrofas

Aquí me pongo a cantar
Al compás de la vigüela;
Que el hombre que lo desvela
Una pena extraordinaria,
Como la ave solitaria
Con el cantar se consuela.

Pido a los Santos del Cielo
Que ayuden mi pensamiento;
Les pido en este momento
Que voy a cantar mi historia,
Me refresquen la memoria
Y aclaren mi entendimiento.

Vengan, santos milagrosos,
Vengan todos en mi ayuda,
Que la lengua se me añuda
Y se me turba la vista.
Pido a mi Dios que me asista
En una ocasión tan ruda.

Yo he visto muchos cantores
Con famas bien obtenidas,
Y que después de adquiridas
No las quieren sustentar:
Parece que sin largar
Se cansaron en partidas.

Cantando me he de morir,
Cantando me han de enterrar,
Y cantando he de llegar
Al pie del Eterno Padre.
Dende el vientre de mi madre
Vine a este mundo a cantar.

Que no se trabe mi lengua
Ni me falte la palabra
El cantar mi gloria labra
Y poniéndome a cantar,
Cantando me han de encontrar
Aunque la tierra se abra.

Segunda Parte: La Vuelta de Martín Fierro
Capítulo XXXII

Un padre que da consejos
Más que padre es un amigo;
Ansí como tal les digo
Que vivan con precaución:
Naides sabe en qué rincón
Se oculta el que es su enemigo.

Yo nunca tuve otra escuela
Que una vida desgraciada:
No estrañen si en la jugada
Alguna vez me equivoco,
Pues debe saber muy poco
Aquel que no aprendió nada.

Hay hombres que de su cencia
Tienen la cabeza llena;
Hay sabios de todas menas,
Mas digo, sin ser ducho:
Es mejor que aprender mucho
El aprender cosas güenas.

No aprovechan los trabajos
Si no han de enseñarnos nada;
El hombre, de una mirada,
Todo ha de verlo al momento:
El primer conocimiento
Es conocer cuándo enfada.

Su esperanza no la cifren
Nunca en corazón alguno;
En el mayor infortunio
Pongan su confianza en Dios;
De los hombres, sólo en uno,
Con gran precaución en dos.

Las faltas no tienen límites
Como tienen los terrenos;
Se encuentran en los más güenos,
Y es justo que les prevenga:
Aquel que defectos tenga,
Disimule los ajenos.

Al que es amigo, jamás
Lo dejen en la estacada,
Pero no le pidan nada
Ni lo aguarden todo de él:
Siempre el amigo más fiel
Es una conducta honrada.

Ni el miedo ni la codicia
Es güeno que a uno le asalten;
Ansí, no se sobresalten
Por los bienes que perezcan;
Al rico nunca le ofrezcan
Y al pobre jamás le falten.

Bien lo pasa, hasta entre pampas,
El que respeta a la gente;
El hombre ha de ser prudente
Para librarse de enojos:
Cauteloso entre los flojos,
Moderado entre valientes.

El trabajar es la ley,
Porque es preciso alquirir;
No se espongan a sufrir
Una triste situación:
Sangra mucho el corazón
Del que tiene que pedir.

Debe trabajar el hombre
Para ganarse su pan;
Pues la miseria, en su afán
De perseguir de mil modos,
Llama a la puerta de todos
Y entra en la del haragán.

A ningún hombre amenacen,
Porque naides se acobarda;
Poco en conocerlo tarda
Quien amenaza imprudente:
Que hay un peligro presente
Y otro peligro se aguarda.

Para vencer un peligro,
Salvar de cualquier abismo
-Por esperiencia lo afirmo-,
Más que el sable y que la lanza
Suele servir la confianza
Que el hombre tiene en sí mismo.

Nace el hombre con la astucia
Que ha de servirle de guía;
Sin ella sucumbiría:
Pero, sigún mi esperiencia,
Se vuelve en unos prudencia
Y en los otros picardía.

Aprovecha la ocasión
El hombre que es diligente;
Y, tenganló bien presente:
Si al compararla no yerro,
La ocasión es como el fierro:
Se ha de machacar caliente.

Muchas cosas pierde el hombre
Que a veces las vuelve a hallar;
Pero les debo enseñar,
Y es güeno que lo recuerden:
Si la vergüenza se pierde,
Jamás se vuelve a encontrar.

Los hermanos sean unidos
Porque esa es la ley primera;
Tengan unión verdadera
En cualquier tiempo que sea,
Porque, si entre ellos se pelean,
Los devoran los de ajuera.

Respeten a los ancianos:
El burlarlos no es hazaña;
Si andan entre gente estraña
deben ser muy precavidos,
Pues por igual es tenido
Quien con malos se acompaña.

La cigüeña, cuando es vieja,
Pierde la vista, y procuran
Cuidarla en su edá madura
Todas sus hijas pequeñas:
Apriendan de las cigüeñas
Este ejemplo de ternura.

Si les hacen una ofensa,
Aunque la echen en olvido,
Vivan siempre prevenidos;
Pues ciertamente sucede
Que hablará muy mal de ustedes
Aquel que los ha ofendido.

El que desobedeciendo vive
Nunca tiene suerte blanda,
Mas con su soberbia agranda
El rigor en que padece:
Obedezca el que obedece
Y será güeno el que manda.

Procuren de no perder
Ni el tiempo ni la vergüenza;
Como todo hombre que piensa,
Procedan siempre con juicio;
Y sepan que ningún vicio
Acaba donde comienza.

Ave de pico encorvado
Le tiene al robo afición;
Pero el hombre de razón
No roba jamás un cobre,
Pues no es vergüenza ser pobre
Y es vergüenza ser ladrón.

El hombre no mate al hombre
Ni pelé por fantasía;
Tiene en la desgracia mía
Un espejo en que mirarse;
Saber el hombre guardarse
Es la gran sabiduría.

La sangre que se redama
No se olvida hasta la muerte;
La impresión es de tal suerte,
Que, a mi pesar, no lo niego,
Cai como gotas de juego
En el alma del que la vierte.

Es siempre, en toda ocasión,
El trago el pior enemigo;
Con cariño se los digo,
Recuérdenlo con cuidado:
Aquel que ofiende embriagado
Merece doble castigo.

Si se arma algún revolutis,
Siempre han de ser los primeros,
No se muestren altaneros,
Aunque la razón les sobre:
En la barba de los pobres
Aprienden pa ser barberos.

Si entriegan su corazón
A alguna mujer querida,
No le hagan una partida
Que la ofienda a la mujer:
Siempre los ha de perder
Una mujer ofendida.

Procuren, si son cantores,
El cantar con sentimiento,
Ni templen el estrumento
Por sólo el gusto de hablar,
Y acostúmbrense a cantar
En cosas de jundamento.

Y les doy estos consejos
Que me ha costado alquirilos,
Porque deseo dirigirlos;
Pero no alcanza mi cencia
Hasta darles la prudencia
Que precisan pa seguirlos.

Estas cosas y otras muchas
Medité en mis soledades;
Sepan que no hay falsedades
Ni erro en estos consejos:
Es de la boca del viejo
De ande salen las verdades...
 
Sobre el Autor 

José Rafael Hernández y Pueyrredón

José Hernández fue un poeta y periodista argentino (San Martín, Buenos Aires, 10-XI-1834 - 21-X- 1886) que en su juventud abrazó la causa Federal, tomó parte en los enfrentamientos civiles de 1859- 1861 en el bando de Urquiza y contra Mitre. En sus artículos periodísticos denunció los abusos e injusticias en el reclutamiento de gauchos para las campañas contra el indio. En 1872, de esta atmósfera surgiría El Gaucho Martín Fierro, su más celebrada obra.
Fue redactor del periódico El Argentino y fundador del Río de la Plata, vivió exiliado en Brasil; de nuevo en Argentina, ingresó en el Partido Autonomista, por el que fue diputado en 1879-1881. El éxito inmediato de Martín Fierro lo impulsó a la publicación de una segunda parte, La Vuelta de Martín Fierro (1879), que en ediciones posteriores se ha publicado conjuntamente con la primera. Tanto en su obra periodística como poética, vinculada a la tradición gauchesca, tomó partido por la defensa del campo frente a la ciudad.
El día después de su muerte, publicó "El Diario": "La muerte sorprendió a José Hernández en pleno vigor físico e intelectual, pues nadie hubiera creído que el temperamento exuberante del más popular de los poetas nacionales, estuviese minado por un mal fatal e incurable. Es uno de esos acontecimientos que trasponen los límites de nuestro país y unen en un sentimiento de común dolor a todos los pueblos que bañan los grandes ríos nacionales".
La enfermedad que causó la muerte del autor del Martín Fierro, fue la miocarditis o inflamación de los músculos del corazón. Se cuenta que sintiéndose morir, le dijo a su hermano Rafael: -No hay que hacerse ilusiones. Esto está concluido...
Al fallecer, el cortejo fúnebre partió a las cuatro de la tarde de la quinta donde vivía, en la calle Santa Fe del barrio de Belgrano. Hizo uso de la palabra el General Lucio Mansilla, asistiendo al acto numerosas personalidades, senadores provinciales y multitud de público.

miércoles, 3 de febrero de 2010

José María Gatica. Pobreza, Estrellato, Pobreza y Leyenda

José María Gatica

Fue un afamado boxeador argentino de peso ligero de los años '40 (1925 - 1963) que realizó 95 combates, de los que ganó 85 (72 por knock out), empató 2 veces, tuvo una sin decisión y perdió en 7 oportunidades pero sobre todo, fue una figura inmensamente popular en Argentina. Aunque nunca se consagró campeón ni peleó por el título mundial, Gatica pasó de la nada a la gloria.
Su perfil popular y su indudable carisma -además de ser un boxeador agresivo y ambicioso- atrajeron la atención del público. Gatica se granjeó el apoyo de la clase popular que lo apodó el Tigre por la fuerza en el combate, pero los aficionados de clase alta deploraban su falta de clasicismo y ellos lo apodaron el Mono, caricaturizando su color de piel y sus facciones.
El Presidente Juan Domingo Perón le había demostrado aprecio; en una ocasión en el Luna Park se lo presentaron y Gatica con desparpajo lo saludó con una frase que se haría muy famosa: "General: dos potencias se saludan!". Muchas son las historias que se han escrito sobre el inolvidable boxeador argentino y algunas de ellas ya se han convertido en leyenda.

Pte. Juan Domingo Perón y José María Gatica se saludan

Por su modo de ser se ganó el amor incondicional de muchos y el desprecio de otros debido a su personalidad tan desbordante como controvertida. En realidad, tenía espíritu de niño y ciertos complejos de una infancia con carencias. No tuvo amigos, apenas dos o tres compañeros de aventuras y en su caída ya no tenía a su lado a los "amigos del campeón", quienes lo esquilmaron económicamente.
Su último combate pugilístico lo hizo en 1955, y luego volvió a la pobreza de su infancia, trabajando irregularmente. A fines de la década del '50 atrajo brevemente la atención del público cuando sus escasos bienes se perdieron en una inundación.
Para colmo de males, el 12 de noviembre de 1963, con sólo 38 años de edad, a la salida de la cancha de Independiente fue atropellado por un colectivo y falleció por las heridas producidas. Fue velado en la Federación Argentina de Box y despedido por una infinita multitud conmovida, tanto, que el féretro tardó siete horas en llegar al Cementerio de Avellaneda.

martes, 2 de febrero de 2010

Isidoro Cañones, Rey de la Noche Porteña

Isidoro Cañones

Todos quisiéramos ser él en algún momento de nuestra vida; -"Dejámelo a mí"- decía el siempre exquisito Isidoro Cañones, inolvidable personaje de historieta creado por Dante Quinterno en 1935 y que encarna al playboy porteño por excelencia. Canchero y divertido, una de las razones del éxito del emblemático personaje se debe a que Isidoro tiene una vida llena de tentaciones. Representa una época de oro de la noche de Buenos Aires y recrea al prototipo del hombre de la noche, el típico chanta porteño. Tiene todos los vicios de la vida fácil; es fanático de las carreras de caballos, los autos deportivos, el casino, el poker, el baile y las fiestas nocturnas con sus amigos.


Nadie sintetizó mejor al porteño y al argentino promedio; el gran Quinterno nos presenta a un chanta irresponsable pero increíblemente carismático, un frívolo que justificaba sus infames estafas para obtener guita, chapa y chicas. Sus compañeros carecen de iniciativa sin Isidoro, es un líder natural. Galán atrevido y transnochador, para él trabajar es casi ignominioso.


El díscolo playboy se pasa el día pensando a quien embaucar porque tiene pocos escrúpulos pero sus andanzas fascinan incluso a aquellos que no comulgan con su ética y métodos y logra que muchos quieran vivir la vida como él.
Nuestro protagonista vive en la mansión de su tío, el Coronel Urbano Cañones, quien está muy bien económicamente. El descarriado Isidoro goza de una pensión vitalicia que le otorgó su tío para darse todos los gustos, sus divertidas aventuras son ya inolvidables.


Exceptuando por los eternos sermones del Coronel, se podría decir que la vida de Isidoro es un festejo permanente; el tío lo quiere enderezar a los gritos y lo llama "tunante", "pelafustán", "botarate", en cambio Isidoro se refiere a su tío como "carcamán" u "oxidado". Es evidente que jamás se pondrán de acuerdo ni tendrán ni un sólo punto en común y ahí radica uno de los puntos más desopilantes de la historieta.


Su bebida favorita es el scotch. Vive de noche. Duerme de día. Viste los mejores trajes y ropa de moda y siempre está acompañado por las mejores modelos del momento y famosos del jet set. Su rutilante amiga Cachorra lo acompaña en sus negociados y estafas, Isidoro la conoció en un viaje a Mar del Plata, ciudad en la cual realizaba las mejores fiestas. Cachorra viene a ser la versión femenina de Isidoro pero ante los ojos del Coronel Cañones se muestra como una chica de familia, estudiosa y responsable.


Lo mejor de todo es que Isidoro se mete en líos para ganar dinero fácil u obtener algún beneficio personal pero siempre sale airoso de cualquier problema al final de la aventura. Las divertidísimas aventuras de Isidoro Cañones marcaron la vida de varias generaciones de argentinos quienes veían al siempre joven Rey de la Noche como un ganador nato con las mujeres y a quien todo le salía generalmente bien. Además creo que la identificación con el personaje se debe a que mostraba una Buenos Aires real, identificable y a que -si bien Isidoro era tramposo y algo indolente- también era optimista y, en el fondo, de buen corazón.