jueves, 28 de junio de 2012

Los Aztecas, su Compleja y Apasionante Historia

Los Aztecas, la Civilización Amerindia Mejor Estudiada

Los aztecas pertenecían al grupo de pueblos chichimecas, cazadores y recolectores de lengua nahua, que desde su lejano hogar, en el actual estado de Utah (Estados Unidos), fueron desplazándose hacia el sur a partir del siglo VIII d. C.
Tras un período de establecimiento en Nuevo México, continuaron su emigración y llegaron al valle central de México en el siglo XII. Allí ya existía una civilización de origen nahua, los toltecas, que habían absorbido la cultura de los pueblos sedentarios anteriores (como Teotihuacán) y fundado un gran imperio, con capital en Tula. Pero los problemas internos y la invasión de sus parientes, los chichimecas venidos del norte, acabaron con el imperio tolteca, cuyos territorios se repartieron en nuevos Estados. Los aztecas o mexicas, uno de los últimos pueblos en llegar (siglo XIII), se establecieron en la región de las lagunas (Anahuac), al principio como tributarios y mercenarios de principados más poderosos, como los tepanecas de Azcapotzalco o los culhúas de Culhuacán, herederos de los toltecas. El prestigio de estos últimos hizo que los aztecas, recientemente establecidos en Tenochtitlán, les pidieran un señor de su linaje, el tlatoani ("jefe de hombres") Acamapixtli (1376-1396), aunque siguieron sometidos al poder superior de los tepanecas, con los que también se establecieron lazos dinásticos.

Alcance del Imperio Azteca

Sin embargo, en 1426 se produjo una lucha por el poder en Azcapotzalco, de la que salió vencedor Maxtla, que hizo matar al tlatoani azteca Chimalpopoca. En ese momento, los aztecas se aliaron con las ciudades de Texcoco y Tlacopán para deponer al usurpador, vengar la muerte de su tlatoani y, sobre todo, sacudirse el yugo tepaneca. La victoria lograda por la coalición bajo el mando del azteca Izcóatl destruyó el poder de Azcapotzalco y convirtió a los aliados en la máxima autoridad del valle de México (1430). Poco a poco extendieron su dominio por el antiguo imperio tepaneca, y bajo Moctezuma (1440-1469) y Axayácatl (1469-1481) ensancharon sus dominios hasta constituir un auténtico imperio en México central, recibiendo los tributos de regiones distantes. Mientras tanto, Tenochtitlán, la capital de la confederación, creció y se convirtió en una gran ciudad. Ahuitzotl (1486-1502) llevó al imperio azteca a su máxima extensión, alcanzando las costas del golfo de México por el este y el litoral del Pacífico por el oeste, las fronteras de Guatemala por el sur y Puebla por el norte.
Los aztecas eran el grupo dominante en la confederación; su espíritu militarista había hecho posible todas esas conquistas. A la muerte de Ahuitzotl, su hijo Moctezuma II (1502-1520) fue elevado al trono. El nuevo monarca imprimió un carácter autoritario a su gobierno y pretendió reafirmar el dominio azteca sobre un imperio que era aún una confederación de pequeños Estados sometidos a tributo. De hecho, todavía algunas ciudades-Estado de México central, como Tlaxcala, Cholula o la misma Texcoco, se oponían al predominio de Tenochtitlán. Esto fue aprovechado por los españoles, que, al mando de Hernán Cortés, desembarcaron en Veracruz en 1519. Los primeros informes que llegaron al tlatoani sobre estos extraños hombres pálidos, barbudos y cubiertos con cascos brillantes hicieron creer a Moctezuma, extremadamente religioso, que se trataba del regreso de Quetzalcóatl ("serpiente emplumada"), el héroe civilizador mesoamericano por excelencia, del que las leyendas afirmaban que regresaría un día desde Oriente.

Hernán Cortés y Moctezuma

La indecisión del rey y las disensiones internas facilitaron la entrada en la capital de Cortés, que se apoderó de Moctezuma. En 1520 se produjo una reacción que obligó a los españoles a retirarse de Tenochtitlán con numerosas pérdidas ("Noche Triste"); el propio Moctezuma murió. Pero el frágil Estado azteca estaba ya profundamente afectado, y al año siguiente Cortés logró conquistar Tenochtitlán y capturar a Cuauhtémoc, el último tlatoani, al que hizo ejecutar en 1525. Desde entonces, el mundo azteca y mesoamericano en general entró a formar parte del imperio colonial español.

miércoles, 20 de junio de 2012

Alta en el Cielo

El General Belgrano, enarbolando por primera vez la Bandera Argentina

"Soldados, hijos dignos de la patria, camaradas míos: (...) el 25 de mayo será para siempre memorable en los anales de nuestra historia, y vosotros tendréis un motivo más de recordarlo, cuando, en él por primera vez, veis la bandera nacional en mis manos, que ya os distingue de las demás naciones del globo, sin embargo de los esfuerzos que han hecho los enemigos de la sagrada causa que defendemos, para echarnos cadenas aún más pesadas que las que cargábais (...) no olvidéis jamás que nuestra obra es de Dios, que él nos ha concedido esta bandera, que nos manda que la sostengamos, y que no hay una sola cosa que no nos empeñe a mantenerla con el honor y decoro que le corresponde. Nuestros padres, nuestros hermanos, nuestros hijos, nuestros conciudadanos, todos, todos, fijan en vosotros la vista y deciden que a vosotros es a quienes corresponderá todo su reconocimiento, si continuáis en el camino de la gloria que os habéis abierto. Jurad conmigo ejecutarlo así, y en prueba de ello repetid: ¡Viva la Patria!"

Don Manuel Belgrano, uno de los Padres de la Patria, aunque era abogado, pasó años dirigiendo campañas militares; primero para conseguir y luego para defender la Independencia de las Provincias Unidas. Fue integrante de la Primera Junta y participó del Congreso de la Independencia en 1816, y dedicado a la Revolución perdió toda su fortuna. Para distinguir sus tropas de las españolas, creó esta bandera que los soldados juraron besando la cruz que el general formó con su espada.
Por sus victorias de Tucumán (1812) y Salta (1813), su nombre subió al podio de los héroes del momento y un año después de su muerte, le fue dedicada una obra teatral llamada "La Batalla del Tucumán", allí, Belgrano aparecía en el Olimpo junto a los dioses. Pasó a la inmortalidad el 20 de junio de 1820, por eso en su honor hoy conmemoramos al máximo símbolo de nuestra patria, la Bandera Nacional Argentina.

lunes, 18 de junio de 2012

Mis Amigas son lo Más!

No es mi cumpleaños, no es el cumple del blog ni es un día especial, pero unas colegas blogueras han coincidido en agasajarme con bonitos detalles que hacen más agradable mi estadía bloguera, y tantas son las atenciones como generoso es su corazón.
En principio deseo agradecer a una lúcida poeta y compositora con visión de Rayos X: señora Ira Buscacio porque me dedicó esta poesía, un homenaje a las mujeres.

A mulher estende-se diante do vidro prateado
E reage dando-lhe as costas,
Sua face luta contra a verdade
E a verdade é rápida.
- guilhotina para pescoços –
Volta! Ela sempre volta aonde abandona os olhos.
Mas ela o ama! Como a um Deus
Mas ela o odeia! Como a um homem
Ri um riso epilético e chora
Chora um choro terrível e ri
A mulher escurece, pouco a pouco,
Sua lua transborda por poros de cascos avariados.
- a luz sempre encontra uma brecha -
A mulher amanhece, subitamente,
Sua noite recolhe-se nas unhas esmaltadas
- a escuridão sempre afia as garras na mudez -
Dança a balada das loucas,
Não há testemunhas,
Os livros estão fechados sobre a prateleira.
Veste-se de calcinha rendada,
Como se a porta fosse invadida por objetivos epidérmicos,
Sem sacrifícios.
Pinta a boca de sangue e sangue é vermelho,
E vermelho é cor do amor,
E amor é toda sua boca de sangue.
É tudo que sobrevive ao seu corpo mixa de ninguém.
Há reflexos de santos mortos pelo chão
E fotografias apagando-se
O vidro doméstico guarda as distâncias.
- do tempo e dos nomes -
O vidro doméstico guarda os segredos.
- do céu e do inferno -
Ela o beija, quando não o cospe
E tomba de inteira e embaçada.


Ira Buscacio

Gracias a Maria Alice Cerqueira, uno de los ángeles que puebla la red y la embellece con su dulzura y espiritualidad.

Atención de María Alice Cerqueira

Gracias a Iskrica-Natasa, divertida y soñadora amiga que hace magia reciclando; con su toque amoroso todo recobra un nuevo encanto.

Atención de Iskrica

Gracias a la artista Lucia Costa Siqueira por su amistad, su dulzura y por las bellas creaciones que siempre nos presenta.

Atención de Lu

Gracias a los simpáticos amigos Raphael & Mynda por su buena onda en todo lo que emprenden.

Atención de R & A

Gracias a Raquel Campos -talentosa escritora de historias atrapantes y fantásticas- por este hechizante grimorio.

Atención de Raquel Campos

Gracias a la glamorosa diosa de la moda, Marcela Gmd.

Atención de Marcela Gmd

Gracias a la chispeante y querida amiga Elaine Averbuch Neves.

Atención de Elaine

Gracias a Sandra Veneziani, hada bondadosa que surca la red esparciendo su mágica belleza.

Atención de Sandra Veneziani

Gracias al mágico mundo de Pixia por esta bonita Vaquita de San Antonio que "Porta Fortuna"; cuenta la leyenda que quien se lleve esta imagen a su blog verá tres veces aumentado su tráfico.

Atención de Pixia

Chicas, ustedes son encantadoras... me siento afortunada por haberlas encontrado en este camino virtual. Gracias por alegrarme, gracias por el calor que brindan y por hacer de Internet un lugar mejor. Las llevo a todas en mi corazón, ustedes son lo más!

jueves, 14 de junio de 2012

¡La Gran Flauta!

El Pífano - Édouard Manet

Iba tocando mi flauta
a lo largo de la orilla;
y la orilla era un reguero
de amarillas margaritas.

El campo cristaleaba
tras el temblor de la brisa;
para escucharme mejor
el agua se detenía.

Notas van y notas vienen,
la tarde fragante y lírica
iba, a compás de mi música,
dorando sus fantasías,

y a mi alrededor volaba,
en el agua y en la brisa,
un enjambre doble de
mariposas amarillas.

La ladera era de miel,
de oro encendido la viña,
de oro vago el raso leve
del jaral de flores níveas;

allá donde el claro arroyo
da en el río, se entreabría
un ocaso de esplendores
sobre el agua vespertina…

Mi flauta con sol lloraba
a lo largo de la orilla;
atrás quedaba un reguero
de amarillas margaritas…

Juan Ramón Jiménez
 
La melodía de la flauta desde siempre ha poblado de belleza la imaginación y, aunque adoro más que a ningún otro instrumento musical al fascinante y sofisticado violín, hoy homenajeo a la sencilla flauta porque creo que también gracias a ella el poder de la música es mayor; quizás se deba a la dulzura de su sonido lo que la hizo tan popular y por lo que desde siempre se la asocia a distintos mitos relacionados con su magia.

El Pastor Flautista - Mariano Fortuny Marsal

Cuenta la leyenda que Pan, el dios griego de los pastores y rebaños, que solía espiar a las ninfas cuando dormían la siesta, se enamoró de una de ellas, Siringa, quien no le correspondía. La ninfa, aterrorizada por la persecución que sufría, se transformó en caña. Cuando Pan se dio cuenta, se abrazó a las cañas y decidió construir un instrumento musical con ellas: la flauta Siringa, o Flauta de Pan.

Pan y Siringa - François Boucher

Cautivante y seductora, no por nada la flauta estuvo asociada a hechos mágicos, basta recordar al legendario Flautista de Hamelin y su enigmática leyenda...

El Flautista de Hamelin

... o la mítica y maravillosa historia que cuenta Mozart en "La Flauta Mágica": el príncipe Tamino decide rescatar a Pamina, hija de la Reina de la Noche, y la reina le concede una flauta mágica para que la proteja.
Entre 1530 y 1650, la flauta vivió su época de oro y Händel aportó mucho a eso. La aparición de la flauta traversa barroca, de madera, aumentó la potencia sonora de la flauta dulce. Ya en el clasicismo se produjo una distinción entre ellas: la flauta dulce se utilizaba en música de cámara, mientras que la traversa ganó su espacio como instrumento solista y -actualmente de metal- es usada en las grandes orquestas del mundo. Y además se la estudia en todos los colegios.
En Argentina este amable instrumento está presente en el habla del día a día ya que así llamamos a un sabroso pan que tiene esa forma; también cuando hacemos referencia a "entre una cosa y otra" generalmente sin importancia, decimos: "entre pitos y flautas" y ante un hecho sorpresivo está muy difundida la expresión: "¡La Gran Flauta!"

jueves, 7 de junio de 2012

Paul Gauguin, el Pintor que Huyó al Paraíso

Paul Gauguin  (1848-1903)

"Llegará un día -quizá muy pronto- en que me enterraré en los bosques de alguna isla de los mares del Sur, y viviré allí en éxtasis, en paz, con mi arte, rodeado de una nueva familia, lejos de Europa y de las luchas por el dinero". Estas duras palabras fueron escritas por el pintor a su esposa Mette, la madre de sus cinco hijos. Paul Gauguin, rebelde autodidacta de biografía apasionante, que creía fervientemente en su genialidad, recaló en una familia que influyó enormemente en su carácter inquieto. Su padre era un periodista de ideas republicanas; su abuela materna, Flora Tristán, una criolla peruana que se convirtió en una de las grandes personalidades del marxismo y el feminismo francés. Con o sin fundamento, Flora manifestaba ser, por una parte, descendiente del virrey de Perú que ordenó el primer viaje a las islas Marquesas, y por otra, de una noble estirpe inca.

"Visión después del Sermón"

"El Escultor Aube y su Hijo"

Gauguin jamás dudó de que por sus venas fluía el exotismo y le encantaba mostrarse como un salvaje civilizado. Tras pasar unos años de su infancia en Lima, donde sus padres se habían refugiado en tiempos del emperador Napoleón III, aquel joven dio la vuelta al mundo empleado como marino en barcos mercantes.
A los 22 años decidió sentar cabeza,  e inició una exitosa carrera como agente de bolsa en París, se casó, tuvo cinco hijos... pero poco iba a durar aquella vida hogareña. La larva de la pintura se había instalado en él. Primero, como un pasatiempo. Luego, su naturaleza agreste lo impulsó a dejarlo todo por su gran pasión.
 
"El Cuidador de Cerdos"

"El Baile de las Cuatro Bretonas"

"La Bella Ángela"

El bullicioso París artístico de finales del siglo XIX era un lugar para alcanzar la gloria o un lugar para hundirse en la miseria y la desesperanza. En ese torbellino imparable un pintor podía ser catapultado al cielo o condenado al infierno. Las nuevas tendencias se sucedían incesantemente, como en un carrousel imparable y en aquella avalancha era muy fácil pasar desapercibido, no lograr el favor de la crítica o no vender ni un sólo cuadro. De este París vanidoso y cruel huía en 1891 Paul Gauguin. Su destino: el paraíso, Tahití, en la Polinesia francesa.
Sintiéndose profundamente incomprendido, Gauguin dejaba atrás en París un reguero de trifulcas y casi ningún cuadro vendido. Su peculiar visión artística y su temperamento no le granjearon demasiados amigos.  A sus diferencias con Pissarro, Manet, Monet, Cézanne y Degas, hay que agregar la bronca más famosa:  fue con Van Gogh, en esa ocasión en que éste último, desesperado, se automutiló una oreja.

"Ronda de las Pequeñas Bretonas"
 
"Vincent van Gogh pintando Los Girasoles"

"Los impresionistas buscan lo que está cerca del ojo, y no los misteriosos centros del pensamiento. Tiene que existir alguna fórmula de plasmar los pensamientos en un formato distinto a la literatura".
Cuando pintó su Autorretrato con Cristo Amarillo usando ese color y con cuatro trazos abstractos se produjo una conmoción "¡¿Por qué amarillo?!" Así fue como Gauguin puso los cimientos a los que los críticos consideraban "arte egoísta" y hoy llamamos arte contemporáneo: el triunfo de la visión personal.

"El Cristo Amarillo"

"Autorretrato con el Cristo Amarillo"

En la Polinesia trató de mitigar su frustración por el escaso éxito de su arte pero también encontrar  la inspiración definitiva para depurar su pintura embriagándose de una cultura ancestral, mágica e incorrupta por el progreso. Pero lo logró a medias, ya que en Papeete se celebraba el 14 de julio con el mismo entusiasmo que en Francia. De allí pasó a Mataïea, donde creyó ahí sí, definitivamente, encontrar un ambiente salvaje y puro... pero los nativos habían sustituido sus mágicos ritos ancestrales por el cristianismo. A Gauguin le quedó claro que debería inspirarse en su propia imaginación aunque no rehuyó a interpretar la iconografía cristiana. Provocador, a El Nacimiento de Cristo lo plasmó como un cotidiano parto local.

"El Nacimiento de Cristo"

Los nativos lo consideraban su amigo, pero en cambio los europeos lo detestaban por sus ideas. En 1893 el pintor regresó a Francia. Degas, uno de los pocos pintores que, pese a sus diferencias, apreciaba su arte le consiguió un lugar para exponer. El fracaso de crítica y público fue rotundo. Una de las pocas voces que se alzaron a su favor fue la del escritor Stéphane Mallarmé, pero en general nadie entendía sus cuadros.

Retrato de Jeanne Goupil

"Jinetes en la Playa"

Amargado, con gran afición al alcohol, con problemas cardíacos y enfermo de sífilis regresa a Tahití. Allí pintó más intensamente que nunca, aunque a veces debía emplearse en la administración francesa para costearse las medicinas. Su pintura se volvió cada vez más alegórica y el dibujo ya se acercaba al arte abstracto.

"Mujeres de Tahití"

"Aguas Deliciosas"

"Arearea"

La famosa obra ¿De dónde venimos? ¿Quiénes somos? ¿Adónde vamos? fue el testamento artístico del pintor. Después de pintar este cuadro intentó quitarse la vida con arsénico, pero sobrevivió y se mostró molesto por tener que explicar la idea del cuadro. Dijo que cuando un crítico no encuentra referentes históricos o pictóricos no entiende nada, y que no tiene él por qué abrir los ojos al gran público. Pero en diferentes cartas da algunas interpretaciones: "He hecho una obra filosófica temáticamente similar al Evangelio". El cuadro representa a doce figuras humanas más un ídolo pero para siempre quedó, sin embargo, su críptico mensaje, su visión del sentido de la vida. Un título con tres preguntas que se corresponden a tres grupos de personas, las tres edades del ser humano. Todo un ejercicio de meditación para el espectador porque, como escribió Gauguin, "explicaciones y símbolos obvios conferirían al lienzo una triste realidad. Y las tres preguntas dejarían de ser un poema". El cuadro se lee de derecha a izquierda, al revés de la costumbre occidental de escritura.

"¿De dónde Venimos? ¿Quiénes Somos? ¿ Adónde Vamos?"

Gauguin no sólo pintó, fue también un escultor y un tallador reputado. Además en Tahití ejerció el oficio de su padre, el periodismo y fundó un periódico satírico, La Sourire. También escribió e ilustró libros y a sus memorias tituladas Avant et Aprés la comenzó con la frase "Esto no es un libro..." que luego se haría archifamosa cuando Magritte, años más tarde, tituló a su cuadro más famoso "Esto no es una pipa". En 1901, inicia el tramo final de su vida, se instala en la isla marquesa Hiva Oa y aquí pinta una de sus últimas grandes obras maestras: El Vado.

"El Vado"

Paul Gauguin, el bohemio pintor que pasó gran parte de su vida buscando el paraíso se entregó a la muerte en 1903. A su lado sólo estaban un hechicero maorí y un sacerdote protestante.