San Antonio de Padua, Doctor de la Iglesia y Santo de los Enamorados

Milagroso San Antonio de Padua

Vino al mundo en Lisboa durante el año 1195 en el seno de una familia adinerada y prestigiosa. Bautizado con el nombre de Fernando de Bulhões, lo cambió por el de Antonio al ingresar en la orden de Frailes Menores, en el año 1220.

Estudió Teología en Italia, enseñó en diversos lugares de Francia y escribió  varios tratados sobre mística y ascética y fue autor de unas Concordancias Morales de los Libros Sagrados. Mi abuela tenía mucha fe en él, decía que realizaba milagros y hechos extraordinarios y cada tanto le prendía una velita. Y para mí es cierto, San Antonio es sumamente eficaz en su intercesión.

Gran predicador y hombre virtuosísimo, recibió el nombre de taumaturgo por su capacidad de obrar prodigios y milagros. Le son atribuidos numerosos episodios sobrenaturales, como la bilocación, ser entendido y comprendido por los peces cuando las personas despreciaron sus predicaciones o de cargar en sus brazos al niño Jesús durante una noche.

Uno de los milagros más famosos de su vida es el de la mula: cierto día, algunas personas que se burlaban de su prédica quisieron desafiarlo a que probase con un milagro que Jesús está en la Santa Hostia: el hombre dejó a su mula tres días sin comer, y luego cuando la trajo a la puerta del templo le presentó un fardo de pasto fresco y al otro lado a Antonio con una hostia. La mula dejó el pasto, se fue ante la hostia y se arrodilló. Imagínense, ante tan conmocionante hecho, la multitud se convirtió en el acto.

Muy joven enfermó de hidropesía y falleció en Padua, Italia, el 13 de junio de 1231, fecha en que se lo conmemora. La ejemplaridad de su vida hizo que fuese canonizado en 1232, apenas un año después de su muerte por ser interminable la lista de favores que han obtenido sus devotos.

Y se cuenta que treinta años después de su muerte, el sarcófago donde se encontraba su cadáver fue abierto y se encontraron con la sorpresa de que, aunque todo su cuerpo estaba ya corrupto, la lengua no, lo que provocó una nueva oleada de devoción. Tan milagroso personaje es el patrón de los pobres que hasta se lo invoca para encontrar novio (recuerden la canción que dice "pedile a San Antonio que te mande un novio...") y objetos perdidos.

Recibió el título de Doctor de la Iglesia en 1946 y es el Patrón de Portugal y de Padua y se lo representa con lirios que representan la pureza de su alma.

Canto a San Antonio

Si buscas milagros, mira

muerte y error desterrados,

miseria y demonios huidos,

leprosos y enfermos sanos.

El mar sosiega su ira,

redímense encarcelados;

miembros y bienes perdidos

recobran mozos y ancianos.

El peligro se retira,

los pobres van remediados;

cuéntenlo los socorridos,

díganlo los paduanos.